martes, 9 de agosto de 2011

colonias inglesas en norteamerica

Cuando los franceses crearon en Canadá una sociedad forjada cuidadosamente, las colonias inglesas se expandieron hacia el sur rápida y atropelladamente. La idea de que la colonización producía riquezas fue sagazmente vendida a los ingleses de todas las clases antes de la muerte de Isabel I (1603). Los comerciantes de Londres y Bristol estaban listos para colonizar, ellos podían organizar empresas mediante las sociedades de accionistas. Los conflictos constitucionales y religiosos que convulsionaban a Inglaterra durante la mayor parte del siglo XVII proporcionaron a muchos pueblos motivos materiales e idealistas para emigrar. El gobierno inglés estimulaba, pero no interfería con los proyectos de colonización. Los ingleses iniciaron sus esfuerzos de colonización trece años antes que los franceses, pero establecieron su primera colonia exitosa sólo un año antes de la fundación de Quebec.


Hacia el norte, en Nueva Inglaterra, se desarrolló una especie de actividad colonial completamente diferente. Los orígenes de la exitosa colonización en esta área surgieron de la controversia religiosa en Inglaterra. En 1607, la pequeña, radical y puritana comunidad de Scrooby, en Nottinghamshire, emigró a Holanda para escapar a la persecución, pero sus miembros pronto se percataron de que la vida entre los holandeses no les satisfacía. En 1620, embarcaron para el Nuevo Mundo.


Esta comunidad logró fundar una colonia estable que se mantenía por sí sola, pero Plymouth nunca llegó a desarrollarse mucho.

El desarrollo de Nueva Inglaterra se generó a partir de las actividades de la Compañía de la Bahía de Massachusetts (Massachusetts Bay Company), creada en 1628 por un grupo de puritanos enriquecidos. En 1630, la compañía transportó 900 individuos a la colonia, pronto se autorizaron nuevos asentamientos por los alrededores de la Bahía de Massachusetts. La idea de los colonialistas era implantar en América el tipo de sociedad que habían intentado establecer en Inglaterra.


Después de la restauración de la monarquía en Inglaterra en 1660, el gobierno real aceptó la causa de la colonización sobre la base de una teoría mercantilista, muy popular en Europa en aquel tiempo. Durante la segunda mitad del siglo, se fundaron nuevas colonias mediante concesiones reales a los propietarios. Hacia 1700, existían doce colonias inglesas en total y se estimó que doscientos mil colonos ingleses vivían en Norteamérica, en comparación con cerca de diez mil franceses. Se establecía así el predominio cultural de los ingleses.





Cual fuel el papel de la iglesia católica en la conquista y colonización de América

En un principio por supuesto que la Iglesia cometió atrocidades, pues veía a los indígenas como "enemigos de la fe".
Tuvo un papel absolutamente intolerante, es cierto, pero también tenemos que tener en cuenta la mentalidad de aquella época, el fanatismo católico en el que se vivía en España en el siglo XV.
Tan sólo tienes que mirar el apodo o sobrenombre con el que se conoció a éstos monarcas, patrocinadores de la empresa descubridora: Los Reyes Católicos. Concretamente fue el Papa Alejandro VI quien concedió a Fernando de Aragón el título de Rey Católico (A Aragón, reino católico más fanático que Castilla, al contrario de lo que nos han hecho creer) por haber dado antes dicho Papa el título de Rey Cristianísimo al rey de Francia.

Hay una anécdota con Atahualpa, a quien Pizarro le dijo que sólo había un dios, y que ese era el cristiano. Atahualpa le preguntó que porqué sabía eso, a lo que Pizarro contestó que lo decía su libro (La Biblia). Atahualpa le pidió que le dejase aquel libro, y poniéndoselo al lado de la oreja, le contestó: Pues a mí no me dice nada.
Finalmente mataron a Atahualpa por rechazar el cristianismo.

Si, es cierto, muchas de las guerras de los hombres han sido a causa de la Iglesia, aunque también tenemos que tener en cuenta que todas las religiones han ejecutado sus cruzadas de religión, como la cruzada islámica.
Ninguna religión hasta la actualidad ha mostrado un comportamiento que no fuese dictatorial e inquisitorio, así como han impuesto por la fuerza sus creencias.

En la Conquista de América por supuesto que la Iglesia Católica jugó un papel importante, pero hay que tener en cuenta que ninguna religión, ninguna, era tolerante.
Mientras Papas, Obispos, Cardenales y un sin fin de prelados y sacerdotes gozaban de sus amantes y tenían hijos, muchos de ellos reconocidos y legitimizados incluso por el rey, se perseguía al hereje, a quien no comulgaba con la religión.

Pero como en todo hay excepciones, y por ejemplo me viene a la mente la figura de Fray Bartolomé de las Casas, quien denunció en sus obras el mal comportamiento de algunos españoles frente a los indígenas, de quienes este fraile fue gran protector. Como Las Casas hay otros tantos, pero evidentemente fueron los menos.
Recuerdo también, porque me toca de cerca, el caso de Fray Alonso Gómez de Encinas, natural de Cuéllar, Segovia (mi tierra) que hizo una "extraordinaria" labor evangelizadora, pero sobre todo humanitaria, teniendo gran cariño y compasión para con los indígenas, afecto compartido por los indígenas hacia él. En la isla de Puná (Perú) le llamaban los indígenas el "Papaz, porque baptiza y confiessa". Para la Iglesia es un mártir, pues fue brutalmente asesinado por una cuadrilla de holandeses, sólo por el hecho de ser católico. Como ves, no solo los cristianos "perseguían a los enemigos de la fe".
Le abrieron el pecho en canal con una espada y le sacaron las entrañas, burlandose de aquella agonía todos los piratas holandeses, que incluso los indígenas defendieron (al fraile) hasta que fueron reducidos por los holandeses.

Como en todas las cosas, les hubo buenos, correctos, pero sobre todo intolerantes e inquisidores, pues también estoy recordando (su nombre no lo logro recordar) aquel fraile que quemó los códices mayas, y gran parte de los documentos que dicha civilización poseía, con el fin "de que olvidasen aquellas herejías".

La Iglesia llegó a América con un único fin: "ganar para Dios almas", imponiendo su religión por encima de todas las cosas, y aquel que no aceptaba aquello como lo ordenaban, se le quitaba la vida. La posterior evangelización, las órdenes religiosas allí fundadas, y todos los frailes y monjas que acudieron "a la llamada de las Indias" fueron mucho más pacíficas que sus predecesores, pero el daño ya estaba hecho, y los indígenas "condenados" a convertirse al catolicismo.
Pero hay que tener muy en cuenta la mentalidad de aquella época, pues para la mayor parte de los frailes el llevar su religión a aquellas tierras era una "bendición", un orgullo, servir a su Dios de aquella manera y dar a conocer a Jesús en un mundo desconocido.
Con los principios morales que tenemos en la actualidad, es evidente que nos puede parecer una barbaridad, pero quizás hay que juzgarlo desde su punto de vista, para poder llegar a entenderlo, por supuesto sin justificarlo, pero estamos hablando del siglo XV, no del XXI.

Organización política y administrativa del imperio español

Se denomina Imperio español o Monarquía universal española[1] (comúnmente simplificado como Monarquía hispánica o Monarquía española) al conjunto de territorios de España o de las dinastías reinantes en España. Alcanzó los 20 millones de kilómetros cuadrados a finales del siglo XVIII, aunque su máxima expansión se produjo entre los años 1580 y 1640, durante los reinados de Felipe II, III y IV. Durante los siglos XVI y XVII creó una estructura propia no llamándose imperio colonial hasta el año 1768,[2] siendo en el siglo XIX cuando adquiere estructura puramente colonial.
No existe una postura unánime entre los historiadores sobre los territorios concretos de España porque, en ocasiones, resulta difícil delimitar si determinado lugar era parte de España o formaba parte de las posesiones del rey de España, o si el territorio era una posesión efectiva o jurídica, en épocas que abarcan siglos, incorporados de forma distinta, heredados o conquistados, y en las que no estaban igualmente definidas la diferencia entre las posesiones del rey y las de la nación, como tampoco lo estaba la hacienda o la herencia ni el derecho internacional. A pesar de todo, el que la Monarquía Hispánica fuera una monarquía autoritaria, casi absolutista, hace que la tesis más lógica sea la de que todas las posesiones del rey, eran posesiones de la nación. De hecho no se puede hablar de una separación de escudo estatal y escudo real hasta bien entrado el siglo XIX, lo cual pone de manifiesto que el rey de España era prácticamente lo mismo que el estado, atendiendo a las delimitaciones del régimen polisinodial por el que se regía el Imperio español.
El Imperio español fue el primer imperio global, porque por primera vez un imperio abarcaba posesiones en todos los continentes, las cuales, a diferencia de lo que ocurría en el Imperio romano o en el carolingio, no se comunicaban por tierra las unas con las otras.

viernes, 27 de mayo de 2011

viajes de descubrimientos.











pedro mendoza.

Conquistador español del Río de La Plata y fundador de Buenos Aires (Guadix, Granada, h. 1487 - en el mar, 1537). Pertenecía a la familia aristocrática castellana de los Mendoza, titulares del Ducado del Infantado. Como paje de cámara de Carlos I llevó una vida cortesana y también guerrera (combatió contra los franceses en Italia).
Por capitulaciones de 1534, el rey le puso al frente de una expedición destinada a penetrar en el interior de Sudamérica desde sus costas orientales, adelantándose a los portugueses en la carrera por alcanzar las fabulosas riquezas de las que hablaban las leyendas indígenas (referentes, sin duda, al imperio incaico). El mismo Mendoza financió la expedición, obteniendo a cambio amplios poderes de conquista y colonización como adelantado, gobernador y capitán general de un extenso territorio.
Partió de Sanlúcar de Barrameda con 13 navíos en 1535, y en 1536 fundó en el estuario del Plata la ciudad de Nuestra Señora del Buen Aire (origen de la actual Buenos Aires), a la que dio ese nombre en honor de una virgen patrona de los marineros de Cerdeña. Entonces comenzaron sus dificultades: enfermo de sífilis, Mendoza hubo de hacer frente a los ataques indígenas y al hambre, mientras se esfumaban sus esperanzas de encontrar la «Sierra de la Plata» o el «Rey blanco» de los relatos míticos.

diego silva.

(Cúellar, España, 1465-Santiago de Cuba, 1524) Conquistador español. Tomó parte en el segundo viaje de Colón, en 1493, y en los años siguientes dirigió la conquista y colonización de la isla de Cuba desde la base de Baracoa, fundada en 1512. En esta labor se mostró muy comedido en su trato con los indígenas, y prefirió utilizar la diplomacia antes que las armas. Tras haber consolidado la posición española mediante el establecimiento de diversos enclaves, como La Habana, Bayamo, Sancti Spiritus y Santiago de Cuba, lugar donde instaló su capital, Diego Velázquez centró su atención en la costa de Yucatán, lugar al que envió diversas expediciones como las de Hernández de Córdoba, Grijalva y Alvarado. Enfrentado con Hernán Cortés, que se había adentrado en tierra firme, y temeroso de su creciente prestigio, realizó varios e infructuosos intentos de apartarle del mando de su expedición a México.